Las ocho son bellas a rabiar, insultantemente jóvenes y caprichosas. Las ocho llevan una bola de billar tatuada en la nuca. La bola ocho, la negra, viene de una familia con servicio doméstico y derecho a la pereza. Eso también la hace diferente. Y cuando se mete en problemas serios, tiene a quien llamar para que la rescate. Miqui Otero retrata con prosa de lujo una Bella durmiente inolvidable.



![People of Color in the United States: Contemporary Issues in Education, Work, Communities, Health, and Immigration [4 volumes]](https://avmedia.ams3.cdn.digitaloceanspaces.com/e/cc/ecc11f5d-a649-46a1-a4f7-2834f0a7a215.webp)










